Aunque pueda parecer la sinopsis de una película de ciencia ficción, nuestro titular es total y perturbadoramente verídico. Un robot de un laboratorio ruso se escapó hace unos días del recinto y se paseó (por suerte no mucho tiempo) por las calles de la ciudad Perm, sembrando el caos en el tráfico de la ciudad.
Digital Trends recoge cómo Promobot, nuestro robot protagonista, fue capaz de salir de su laboratorio mientras realizaba una prueba, gracias al descuido de uno de los ingenieros, que se dejó la puerta de salida abierta. Esto facilitó la escapada del humanoide, aunque por suerte no llegó muy lejos, debido al rápido agotamiento de su batería. "No todos los días la gente se encuentra con un robot, supongo. Había poco tráfico y una persona llamó a la policía", indica Oleg Kivokurtsev, cofundador de la firma dueña de Promobot.
El propósito de este pequeño robotizado, claro es, no es el de estar listo para darse a la fuga en los recintos en los que esté, sino ofrecer asistencia a las personas, relacionándose con clientes de grandes establecimientos públicos. De esta forma, la idea es que "trabaje" en centro de exposiciones, teatros y centros de negocios, acompañando por ejemplo a alguien que le pregunte dónde se encuentra la zona de restauración. Promobot cuenta, entre otras cosas, con reconocimiento facial y de voz, de forma que la próxima vez que te vea, si le has dicho tu nombre, será capaz de reconocerte (y hasta acordarse de cómo te ayudó la última vez).
Si es que siendo tan listo... no es de extrañar que se haya terminado colando en mitad de la ciudad. Si quieres verlo en pleno momento vandálico, no te pierdas el vídeo que tienes a continuación.