Los Raptors, de nuevo sin respuestas ante un equipo
que firma ya 17 victorias consecutivas en postemporada ante equipos del Este.
Gran Kyrie Irving.
¿Hay algún equipo en el Este capaz de hacer sombra a los Cavaliers? Por lo visto hasta ahora, la respuesta es sencilla: un rotundo no. Y no parece que lo vaya a haber. O cambian mucho las cosas en Toronto para los Raptors, o la final de la Conferencia se puede acabar decidiendo por la vía rápida. Una conclusión que llega tras el nuevo paseo protagonizado por los de Ohio. Entre un fantástico LeBron James (23 puntos, 11 rebotes y 11 asistencias para firmar su 15º triple-doble en Playoffs, únicamente Magic Johnson —30— tiene más que en la historia de las series por el anillo) y un gran Kyrie Irving (imparable en el estado de forma por el que atraviesa) se encargaron de volver a destrozar a los canadienses. 108-89 fue el resultado final,aunque podría haber sido todo lo abultado que quisieran los Cavs de haberlo querido. Son las sensaciones que deja el único equipo que sigue sin conocer la derrota en estos Playoffs. Un 10-0 que les coloca a un triunfo del mejor arranque de siempre —los Lakers en 1989 y 2001— y permite a Tyronn Lue establecer el mejor inicio de siempre de un entrenador debutante superando el 9-0 de Pat Riley con los Lakers en 1982.
Monarquía absolutista en el Este
El dominio que
Cleveland está ejerciendo en la Conferencia Este desde el regreso del hijo
pródigo recuerda al de las monarquías absolutistas que durante tantos siglos
rigieron Europa a su antojo. A menudo se argumenta que el nivel competitivo de
la costa Atlántica resulta muy pobre, que habría que ver a los Cavs
en el Oeste para comprobar su verdadero estatus y un largo etcétera. Decir todo
esto es muy fácil. No lo es tanto cumplir con tu papel de
favorito y haber ganado los últimos 17 encuentros de postemporada ante rivales
de tu misma Conferencia (un nuevo récord histórico) y lucir un
22-2 entre este año y el pasado. Palabras mayores. Aunque en lo que a grandes
marcas se refiere, 'King' James también tiene algo que decir. Esta
madruga ha superado a Shaquille O'Neal y ya sólo tiene por delante a
Jordan, Kareem y Kobe con más puntos anotados que él en Playoffs. "Es un orgullo para mi familia, mis fans y para mí ver mi nombre
junto al de esos mitos", comentaría poco después en rueda de
prensa. Precisamente, uno de esos grandes presenció en directo su enésima
exhibición: Kareem Abdul-Jabbar: "Una leyenda que ha venido a
nuestra a casa a vernos jugar. Sólo puedes mostrarle respeto".
.@KingJames (2,253
career #NBAPlayoffs pts)
passed @SHAQ(2,250) for 4th on
the #NBAPlayoffs all-time scoring
list!
Un equipo con denominación de origen
Además de todo lo
anterior, hay que resaltar el extraordinario juego que los de Ohio vienen
realizando en las últimas semanas. Lo dijo Lue en la víspera de este segundo
asalto: ya no es jugar para LeBron, sino jugar con él. El
cambio es evidente. Cleveland es ahora un equipo con alma, reconocible, por
momentos (muy) vistoso y que aprovecha sus recursos a partir de uno de los
jugadores más completos de la historia. El cuatro veces MVP (anotando o asistiendo)
en 20 de los primeros 22 puntos de los locales. Desde el salto inicial, tanto
él como un Irving convertido en
pesadilla para un Lowry completamente superado (10 puntos con 5
pérdidas ya cometidas al descanso para un 4/14 en tiros) y con problemas de
faltas lideraron la orquesta. Aunque eso sí, esta vez los Raptors consiguieron resistir hasta casi el intermedio.
Y lo hicieron con Luis Scola como titular de nuevo
en detrimento de Patterson ante una nueva ausencia de Valanciunas. Entre DeRozan (22 tantos para el mejor en los dinosaurios), unos
inspirados minutos de Terrence Ross y la intimidación de Biyombo, los de Casey
llegaron incluso a tomar la delantera en el segundo acto. Un espejismo. Los
secundarios 'cav' (Love, JR Smith y el intenso Tristan Thompson)
allanaron el terreno para que Kyrie y sobre todo LeBron cerraran
el periodo con un parcial de 16-2 en los últimos 4 minutos.
Pasamos del empate a 46 al 62-48.
Apelar al factor Toronto
Tras la reanudación,
más de lo mismo. Cleveland secaba a su rival con una
notable defensa, sin apenas conceder tiros libres (ahí la
diferencia también fue descomunal: 37-18), mientras que en ataque continuaba
progresivamente aumentando su ventaja. Únicamente Cory Joseph trataba de salvar
la honra de Toronto, un equipo entregado. Y eso que faltaba el cuarto periodo.
Al menos nos permitió ver la confirmación del triple-doble de LeBron. Hizo de todo y todo bien. Con una única rémora: su falta de
acierto tanto en el lanzamiento exterior como desde la línea de tiros libres
(9-17). Detalle irrelevante hoy, pero que no lo podría ser
tanto en unas Finales que los Cavs acarician ya con las manos. Ahora, tras las
dos fiestas del Rey y sus amigos en 'The Q', la eliminatoria se desplaza a
Toronto. Los Raptors se aferran a su pabellón (cuya pantalla gigante en los
aledaños quedó hoy désertica antes de tiempo) para intentar dar la vuelta a una
batalla cada vez más desigual. Cuesta mucho hacer hincar la rodilla a los reyes
del Este: Cleveland Cavaliers y LeBron James. Por si acaso, lanza la siguiente
advertancia: "No queremos perder".


