Para el presidente Nicolás Maduro, Mendoza no es más que un daño a la economía y le ha pedido que, de no poder con sus empresas, las entregue a su Gobierno
Lorenzo Mendoza ha pasado 17 años al frente de Empresas Polar, los mismos que lleva la revolución en el poder. Tras duras críticas y ataques del Estado venezolano a su negocio y a su persona, el ingeniero, como lo conocen en las instalaciones de Polar, confesó para el diario Versión Final: “La política no es mi arena”.
Su carácter, dice él, no le da para la política. “Yo no sirvo para eso”.
“Todo el mundo habla de política y eso tiene ahogada a Venezuela, tiene ahogado al país, esa no es mi arena, yo no sirvo para eso, por lo menos no en la Venezuela que tenemos ahora. Hay que decir demasiadas mentiras y ser demasiado hipócrita para ser político y yo no sirvo para esa vaina”, argumentó.
El ingeniero industrial tiene una particularidad que llama la atención cuando se planta frente a las cámaras: la gente lo ve y lo escucha porque muestra números con extrema claridad y termina desmontando cualquier argumento oficial.
Para el presidente Nicolás Maduro, Mendoza no es más que un daño a la economía y le ha pedido que, de no poder con sus empresas, las entregue a su Gobierno.
información de: www.el-nacional.com